MISAS DEL MES:

Sábado 4: en Argüero, a la una, en honor a Santa Bárbara; en Oles a las 4; en Tazones a las 5 y en San Martín del Mar, a las 6, por Violeta Tuero.

Domingo 5: en San Justo a las 10; en Bedriñana, a las 11, por Arturo Solares; en Careñes, a las 12, por Luis Toral; en Castiello a la una y en San Miguel de Arroes, a las 5, por difuntos familia Alvarez Molleda.

Lunes 6: en Arroes, a la una, por Damián Díaz.

Miércoles 8: en Bedriñana a las 11; en Careñes a las 12; en Castiello a la una y en Arroes a las 5.

Viernes 10: en San Martín del Mar, a las 5, aniversario de Celia Estrada y en La Lloraza, a las 6, en honor a Santa Eulalia.

Sábado 11: en Argüero a la una; en la capilla de Santiago a las 4; en Tazones a las 5 y en San Martín del Mar, a las 6, por Enrique Barro y Aurora Estrada.

Domingo 12: en La Lloraza a las 10; en Bedriñana, a las 11, por J. Manuel, Ataúlfo, Generosa y Mª Carmen; en Villaverde, a las 12, por Julián y por Luis y Nati; en Castiello a la una y en Arroes a las 5.

Lunes 13: en Castiello, a la una, en honor a Santa Lucía.

Sábado 18: en Argüero a la una; en Oles a las 4; en Tazones a las 5 y en San Martín del Mar, a las 6, por Sagrario y Eduardo Tuero.

Domingo 19: en Bedriñana, a las 11, por Evangelista, Palmira e hija; en Careñes a las 12; en Castiello a la una y en San Miguel de Arroes, a las 5, aniversario de Andrés Corsino Fernández Rea.

Sábado 25: en Bedriñana, a las 11, por Manuel Fernández y Mª Luisa Solares; en Sariego a las 12; en Careñes, también a las 12; en Argüero a la una; en la capilla de Santiago a las 4; en Tazones a las 5 y en San Martín del Mar, a las 6, por difuntos familia Pedrayes Riera.

Domingo 26: en Oles (iglesia antigua) a las 10; en Bedriñana, a las 11, ofrecida a la Virgen de la Velilla; en Villaverde, a las 12, por Julián; en Castiello a la una y en Arroes a las 5.

Viernes 31: en Tuero a las 5.

OTROS AVISOS:

-En la reciente colecta que hicimos en favor de la diócesis se recaudaron las siguientes cantidades: Argüero 107 euros; Arroes y San Miguel 85,90; Bedriñana 101,82; Careñes 48,40; Castiello 25,42; Oles 20,10; San Justo 56,90; San Martín 44,91; Tazones 13,70 y Villaverde 42 euros.

-A raíz de mi comentario en la última hoja sobre uno de los Premios Princesa he recibido una llamada de don Víctor de la Concha en la que me vino a decir que él no tuvo una responsabilidad directa en el galardón concedido a doña Gloria Steinem, entre otras razones porque apenas la conocía. Aclarado queda.

-Siguen sonando teléfonos móviles en algunas celebraciones parroquiales y no me creo que nadie sea tan imprescindible como para no poder mantener el móvil apagado durante media hora. Pero bueno, si de verdad hay alguien tan imprescindible, que no entre en la iglesia y problema solucionado.

OPINION:                                                     De apagones

-La casualidad ha querido que en estas semanas en las que toca leer en Misa pasajes bíblicos del género apocalíptico esté circulando por medios y redes el rumor de un posible apocalipsis en forma de gran apagón.
Una ministra austríaca tiró la primera piedra, la bola de nieve empezó a rodar y a engordar y hasta el programa televisivo de Iker Jiménez se atrevió con el tema.
Menos mal que la ministra Ribera nos trajo un poco de tranquilidad, arguyendo que la situación austríaca no es extrapolable a España.
Pero los más medrosos ya no las tienen todas consigo, porque la verdad es que casi todo lo que utilizamos requiere una conexión a la red eléctrica y, por el mero hecho de funcionar, las cosas corren el riesgo de dejar de funcionar y un apagón de varios días o varias semanas pondría el mundo patas arriba.

-Desde luego, en sentido figurado hace tiempo que llegó el apagón.
Tal parece que cuando Jesucristo dijo aquello de “el mundo vive en tinieblas” también estaba pensando en el siglo XXI.
Y, si no lo crees, fíjate en nuestros gobernantes, que no dejan de parir leyes, la mitad de ellas prescindibles o manifiestamente   mejorables.
La penúltima ha sido el anteproyecto de ley sobre la protección de los animales.
Y no es que los animales deban quedar fuera del ámbito de la protección jurídica, pero resulta paradójico que los mismos que desprotegen cada vez más a los seres humanos más desvalidos se empeñen a la vez en proteger cada vez más a los animales.
Entre otras cosas el anteproyecto establece que para la tenencia de perros será necesario un curso previo de formación.
Lo deciden unos diputados que no tuvieron que superar ningún curso de formación para acceder a su escaño.
Les basta con tener “estómago” para votar que “sí” a las propuestas de su partido, por descabelladas que sean, y votar “no” a las propuestas de otros partidos, por sensatas que sean. Tampoco exige la ley ningún curso de formación para algo tan importante como contraer matrimonio, o para ser padre o madre, pero el progresismo de pacotilla ha tenido la ocurrencia de exigir un curso para tener un caniche.
Queda prohibida la venta de mascotas en tiendas, el tiro al pichón, la cría de animales para la peletería, la fauna salvaje en los circos y otras ocurrencias de las que te irás enterando. El tema seguirá el curso habitual, pasando por el Gobierno y el Parlamento…y en enero del 2023 ya seremos más “progresistas”, si entiendes por progresismo poder dejar a un anciano sin movilidad solo en casa los días que quieras, pero no poder dejar solo en el piso al perro 24 horas.

-En medio del apagón moral de nuestra sociedad posmoderna aparecen a veces héroes y heroínas poniendo un poco de luz.
Por ejemplo, los padres de la niña de cinco años atropellada y muerta hace días en Madrid en las inmediaciones del colegio.
Después de darle el último abrazo a su hija, la infortunada madre, de nombre María, tuvo la feliz idea de abrazar a la mujer que la había atropellado, también María y también madre, para quitarle preocupación e intentar tranquilizarla.
¡Qué bonito que quien más necesita consuelo se ofrezca para consolar!
Incluso unos días después publicó con su esposo Alex una carta en la que le daba gracias a Dios, al colegio y a la policía por la atención recibida y volvía a pedir oraciones por la mujer que había atropellado a su hija.
Como se habían enterado de que varias personas no religiosas habían rezado por su hija, incluían en su carta una expresión que puede sorprender: “Dios lo ha permitido para sacar bienes mayores”.
Digo que pueden sorprender estas palabras a un no creyente, pero un creyente sabe que, ante el misterio del mal, caben estas expresiones, que no hay por qué entender literalmente. Estos padres, creyentes y practicantes, saben de sobra que la vida de la niña no es intercambiable por conversiones.
A su hija ya no la podían recuperar, pero sí podían quitarle preocupación a la conductora causante del atropello.
Pues un periodista que junta letras en el diario El Mundo, Arcadi Espadas, se escandalizó por la carta de marras y por el abrazo de las dos Marías e, ignorando su dolor, criticó a los infortunados padres, por “justificar a un Dios criminal y por creer que el torturado puede acabar queriendo al torturador”.
¡Hay que tener mala baba para escribir esas barbaridades!
Se ve que quien se acostumbra a vivir en el apagón permanente no puede soportar que a su lado se encienda una luz.

-El último cuarto para un tema cien por cien eclesial: el Sínodo.
No sé si sabes, paciente lector-a, que el Papa nos ha convocado a todos a Sínodo, supongo que porque piensa que nuestra Iglesia sufre un cierto apagón.
Y un Sínodo implica crear grupos parroquiales para, dicho de forma sencilla, analizar la situación en la que estamos y formular sugerencias que mejoren lo que hay.
El caso es que en Asturias hemos tenido hace poco un Sínodo Diocesano, que movilizó a mucha gente, nos robó muchas horas a todos los que participamos, laicos y consagrados, y acabó en nada o casi nada, entre otras razones porque el Obispo que lo impulsó, don Carlos, fue trasladado de diócesis y al que llegó, don Jesús, le cogería con el pie cambiado o en fuera de juego.
Por ello sospecho que a muchos de los que participaron en el Diocesano no les apetecerá tropezar en la misma piedra y se echarán a un lado.
Y con razón.
Teniendo como tenemos en la diócesis un Consejo Presbiteral y un Consejo Pastoral Diocesano, que nos representan respectivamente a los sacerdotes y a los laicos, y que además malviven medio apagados, porque apenas se les da cancha, se presenta una ocasión pintiparada para que ambos organismos vuelvan a revivir.
Y no lo digo ni por vagancia, ni por hacerle ascos a la “sinodalidad”, ni mucho menos por boicotear el evento, sino por sentido común.
Ni es lógico que hubieran transcurrido cien años desde el penúltimo Sínodo al último, ni lo es que ahora se convoque otro pocos años después del último.