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Septiembre 2020

Nº 18


MISAS DEL MES:

Sábado  5: en Argüero (a las 12 y a la una) Primeras Comuniones; en Oles, a las 5, por Mª Luisa Tuya; en Tazones a las 6; en San Martín, a las 7, por José Fernández Vega y en Castiello a las 8.

Domingo 6: en San Justo a las 10; en Bedriñana, a las 11, por Emilio Argüelles; en Careñes a las 12 y en Arroes, a las 5, por Palmira Paraja.

Martes 8: en Bedriñana, a las 11, por Arturo Solares; en Careñes a las 12; en Argüero a la una; en Arroes a las 5 y en Castiello a las 8.

Miércoles 9: en San Martín del Mar, a las 12, por Mary, Paquita y Fernando Losada Vega.

Sábado 12: en San Justo, a las 12, Primeras Comuniones, en Argüero a la una; en la capilla de Santiago a las 5; en Tazones a las 6; en San Martín a las 7 y en Castiello a las 8.

Domingo 13: en La Lloraza a las 10; en Bedriñana, a las 11, por Enrique, Clementina, Luis, Ramón, Ceferina y Lorenzo; en Villaverde, a las 12, por Lola Piñera y en San Miguel de Arroes a las 5.

Sábado 19: en Argüero a la una; en Oles a las 5; en Tazones a las 6; en San Martín del Mar a las 7 y en Castiello a las 8.

Domingo 20: en Bedriñana, a las 11, por J. Luis Fdez García y sus padres; en Careñes a las 12; en San Miguel de Arroes, a la una, en honor a San Miguel, y en Arroes, a las 5, por Nelly Piñeiro.

Viernes 25: en Tuero a las 6.

Sábado 26: en Sariego a las 12; en Argüero a la una; en la capilla de Santiago a las 5; en Tazones a las 6 y en San Martín a las 7.

Domingo 27: en Oles (antigua iglesia) a las 10; en Bedriñana, a las 11, por difuntos familia Muslera Corujo; en Villaverde, a las 12, por Lola Piñera; en Castiello a la una y en San Miguel de Arroes a las 5.

Martes 29: en Tazones, a la una, en honor a San Miguel.


AVISOS:

-Una vez que comience la actividad en los colegios, “copiaremos” sus métodos (protocolos, que se dice ahora) para iniciar la catequesis.

Seguiremos con las sedes que teníamos el año pasado (Argüero, Arroes, Oles y Tazones) y, si hace falta, añadimos más.
Recuerdo que la norma diocesana es que haya tres cursos preparatorios para la Comunión, coincidiendo generalmente con los tres primeros cursos de Primaria.
También es verdad que en principio la cosa se diseñó para que el primer curso lo impartiesen en casa los propios padres, dado que muchos niños de Primero todavía no saben leer. Así pues, los padres de niños de Primero pueden pasar a verme a lo largo de este mes para recoger el libro.

-Vuelvo a recordar los horarios de despacho en las parroquias en las que los horarios de las celebraciones no me permiten parar apenas nada:
  • en Bedriñana los primeros y terceros martes de mes de once a doce;
  • en Tazones los segundos y últimos martes de mes, también de once a doce;
  • en Careñes los primeros y terceros viernes de doce a una
  • en Villaverde los segundos y últimos viernes, también de doce a una.

-Es una buena ocasión, por ejemplo, para actualizar los títulos de los cementerios y/o legalizar transferencias de nichos que se hayan hecho entre vecinos sin contar con el Obispado.

OPINION:

De procesiones y pandemias

-Aunque no esté escrito en ningún Código o Estatuto, la lógica y el sentido común dicen que las comisiones de festejos deben encargarse de la parte “profana” de las fiestas (baile, voladores, juegos y demás) y que la parte religiosa se organice desde la parroquia.
Todo ello en el bien entendido de que todos los vecinos tienen derecho a opinar, a formular sugerencias y a ofrecerse para colaborar tanto en lo profano como en lo religioso. En la práctica estos principios generales se aplican mejor o peor, según el talante de las personas que medien en la cuestión.
Y así, por ejemplo, en la celebración de las fiestas-no fiestas de este año me cabe decir que en estas diez parroquias se han dado hasta cuatro actitudes distintas en las comisiones de festejos.
En cuatro de ellas la Comisión ni siquiera contactó con la parroquia: dieron por supuesto que este año era distinto, aceptaron las normas de las autoridades civiles y eclesiásticas y no se inmiscuyeron para nada en la celebración parroquial.
Ideas claras, actitud correcta, aplauso para ellos.
En otras tres parroquias la Comisión sí contactó con la parroquia para concertar el horario de la Misa y preguntar si se podía hacer procesión.
Se concertó el horario de la Misa, aceptaron con la misma resignación que aceptamos los demás la prohibición de la procesión…y punto.
Actitud igualmente correcta; aplauso para ellos.
En otras dos parroquias, además de la pregunta por la procesión, la Comisión sugirió darle a la celebración religiosa una animación musical determinada.
Aceptaron sin discusiones que la procesión se suspendiese, como se suspendieron las treinta mil que se celebran al año en España, contrataron la animación musical que deseaban e incluso se ocuparon de atender las prescripciones sanitarias que nos imponen ahora.
Actitud correcta también la de estas dos comisiones, con la salvedad que ya comenté en otra ocasión: quien pretende “mejorar la calidad” de una celebración eucarística con un coro es que no ha entendido bien lo que es una celebración eucarística, pero, en fin, esos son otros lópeces, que hoy no tocan.
La nota disonante tuvo lugar en Tazones, donde no sé si toda la Comisión o una parte de la misma se empeñó en que había que hacer procesión… y la hicieron a su manera, después de ofender verbalmente a los colaboradores parroquiales que tienen la llave de la iglesia por no facilitársela.
El mundo al revés: los de la Comisión de Festejos convertidos en aguafiestas, generando división vecinal y utilizando la imagen de un santo para ello. Quizás sientan estas personas que “ganaron un pulso”, pero hasta un ciego ve que su “victoria” es pírrica: la buena convivencia vecinal no se paga con dinero y, sobre todo, en tiempos de pandemia y crisis económica qué necesidad hay de añadirle más problemas a la vida.
Como suele decirse en los velatorios de personas que fallecen prematuramente, “para cuatro días que vivimos no merece la pena enfadarse con nadie”.
Es por ello por lo que quiero creer que estas personas serán capaces de hacer otra “procesión”, distinta, pero más bonita: “procesionar” hacia las personas a las que ofendieron, pedirles perdón y recuperar la amistad ahora interrumpida.
Está muy bien que el pueblo de Tazones goce de prestigio a nivel turístico, pero estaría mejor aún que destacase por la calidad humana de sus gentes y el buen rollito vecinal.
Que San Roque nos ayude a todos a conseguirlo, evitando que nos contagiemos de la funesta pandemia del rencor y los enfrentamientos personales.

–Por no olvidarnos de la otra pandemia, la del virus, me imagino que ya estarás saturado-a de información, paciente lector-a, pero toda información es poca, porque una sociedad dominada por el pánico pierde la capacidad de razonar ponderadamente y asume cualquier directriz que le imponga la autoridad, por muy inepta y autoritaria que sea, máxime ahora con el despropósito de que pueden darse en España diecisiete soluciones distintas, una por autonomía, para el mismo problema.
Cabe interpretar que el Gobierno central reconoce su fracaso y, para disimularlo, le pasa el marrón a las autonomías: fracaso de diecisiete, fracaso disimulado.
¡Qué bien les salió el invento autonómico a los políticos para echarse la culpa unos a otros y qué mal nos salió a los ciudadanos, que enterramos además en ello millones de euros para casi nada!
El caso es que hemos sido uno de los países donde se han adoptado las medidas más drásticas ante el virus y estamos entre los que peores resultados de contagiados y víctimas estamos teniendo.
¡A ver si va a ser verdad que España es diferente!
Pero bueno, los “medios del régimen” se las van arreglando para que la pandemia afecte lo menos posible al Gobierno del supuesto progreso y, entre la espantá del futbolista Messi, los supuestos pecados del Rey emérito y del americano Trump y los cambios de pareja del torero de turno parece que lo van consiguiendo.
Seguramente no te contarán, porque para ellos “no vende”, esto que te va a contar la hoja parroquial: que los obispos le han ofrecido al Gobierno la posibilidad de utilizar los salones parroquiales como aulas, ante los problemas que se plantearán ahora en los centros de enseñanza, por aquello de tener que guardar alumnos y profesores la “distancia de seguridad”.
Otra cosa es que algunos locales parroquiales reúnan los requisistos adecuados para ello y otra que nuestro peculiar Gobierno acepte ayudas de la Iglesia, pero la oferta se ha hecho y nada que objetar, sino todo lo contrario, a que en los centros parroquiales se pueda aprender también Geografía, Matemáticas o Lenguaje.
En fin, que de momento tendremos que seguir escondiéndonos del virus, pero no basta sólo con esconderse; hay que destruirlo y ya están tardando en encontrar la receta. Menos mal que parece que en esta segunda embestida viene menos letal. A ver qué nos depara el otoño.

J. Manuel Fueyo Méndez